¿Cómo van a pensar estos vecinos que de un día para otro oirán en las noticias que desde esa misma noche no pueden salir a la calle? ¿cómo van a enfrentarse a ese reto setenta mil personas acostumbradas al sol, a la playa, al olor y sabor de la Manzanilla en las tabernas de
la ciudad, a los besos, abrazos y quedadas entre amigos? Ese sábado 14 de marzo la luz es secuestrada, encarcelada».
Este texto forma parte del trabajo que realizó la periodista sanluqueña Penélope Almengló durante los duros meses de la pandemia de covid, de la que ahora se cumplen cuatro años.
Almengló recogió en un interesante trabajo fotográfico muchos de los aspectos inusuales que vivieron los vecinos de Sanlúcar de Barrameda y que no deberíamos olvidar.
‘El presidio de la luz’ es un gran testimonio de una época y de unos hechos que impactaron de forma brutal en nuestras vidas y sirve de recorrido por la esencia vital de una ciudad costera en la que la luz es la gran protagonista.